Balance económico y social al cumplirse el tercer año del gobierno del Cambio
En agosto del año pasado registramos los avances de los indicadores sociales en Colombia durante los dos primeros años del gobierno de Gustavo Petro.
En agosto del año pasado registramos los avances de los indicadores sociales en Colombia durante los dos primeros años del gobierno de Gustavo Petro.
El PND 2023-2026 “Colombia, potencia mundial de la vida” logró un enorme consenso social y regional tanto por su carácter coherente, progresivo y equilibrado como por la recuperación del papel estratégico del Estado colombiano en impulsar el desarrollo económico y el progreso social.
Algo más de tres meses tomó la discusión y aprobación de la reforma tributaria para la Igualdad y la Justicia Social, piedra angular de los programas del nuevo gobierno.
Es inocultable el enorme descontento con la crisis social que golpea a más del 70% de los colombianos y con la falta de respuestas efectivas del Estado.
Por: Arturo Cancino Cadena
Desde el 1º de septiembre Colombia abandona las medidas de confinamiento obligatorio que mantuvo desde la cuarta semana de marzo, cinco meses aunque no sin varias excepciones tempranas, cabe recordar. Así lo decidió y anunció el presidente Duque, para quien el manejo que su gobierno le ha dado a la pandemia ha sido acertado y “basado en la ciencia”, sin errores que valga la pena reconocer o lamentar.
Por: Arturo Cancino Cadena
Varios economistas colombianos han criticado las cifras contenidas en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) que presentó al país el gobierno de Duque por medio de su ministro de Hacienda, Carrasquilla. Coinciden la mayoría de las críticas en catalogar como inverosímiles sus previsiones sobre la caída moderada de la economía este año, de apenas 5.5%, y sus proyecciones sobre la fuerte recuperación del crecimiento en 2021 de 6.6%.
Por: Arturo Cancino Cadena
El 26 de mayo pasado un grupo de 28 destacadas personalidades del mundo académico nacional demandó ante la Corte Constitucional el Estatuto Tributario que rige en Colombia desde 1989. ¿La razón? No cumplir con los principios de progresividad, equidad y eficiencia tributaria que estipula la Constitución. Una de las justificaciones más importantes de la demanda es la urgencia para la sociedad colombiana de contar con un sistema tributario que permita una política fiscal encaminada a reducir la desigualdad social y la pobreza, que la crisis originada por la pandemia ha agudizado en grado extremo.
Por: Arturo Cancino Cadena
Ya llegan a casi 6 millones los contagios de la pandemia y a más de 350 mil sus víctimas fatales de acuerdo con la OMS. Día por día la velocidad de propagación y número de fallecidos se multiplica. Poca gente cuerda y medianamente informada podría atreverse a negar los efectos devastadores que esta peste ha traído a la mayor parte de la población en todos los rincones de la tierra. Es claro que hasta que se disponga de una vacuna efectiva y al alcance de los más de 7.000 millones de seres humanos (o, mínimo, un tratamiento eficaz que neutralice las consecuencias graves de la enfermedad), el regreso al modo de vida anterior al covid 19 es por completo improbable. Pero las expectativas de contar pronto con alguna de estas herramientas sanitarias son muy vagas, a pesar de los esfuerzos de los científicos en Europa, China, Estados Unidos y muchos otros países, respaldados por cuantiosos fondos destinados a su trabajo. Y queda el problema de su producción masiva y de asegurar su distribución universal, sin lo cual el virus no podrá erradicarse.
Por: Arturo Cancino Cadena
Hace poco más de un mes, el gobierno de Duque y su ministro Carrasquilla ponderaban con satisfacción los resultados del crecimiento de 3.3% del PIB de Colombia en 2019 y sus relativamente favorables proyecciones para este año y el 2021 de acuerdo con el FMI. Desestimaban como irrelevantes las críticas a la desfinanciación que le acarrea al Estado colombiano su generosidad gratuita con las grandes empresas en la última reforma tributaria, aprobada a pupitrazo en diciembre pasado bajo el eufemismo de Ley de Crecimiento.
Por: Arturo Cancino Cadena
Buenos, malos o funestos, los gobernantes están hoy en todo el mundo sometidos quizás como nunca al escrutinio de sus propios pueblos. La crisis de la pandemia ha provocado ese efecto en todos los países. Incluso mandatarios ególatras y arrogantes como Trump o Bolsonaro, dedicados a inflar su imagen y pelear sus guerras personales con sus críticos por twitter, hoy hacen a diario la pantomima de rendir cuentas de su desempeño al auditorio de sus naciones. Con seguridad muchos de ellos sólo intentan borrar tardíamente la estupidez de sus reacciones iniciales frente al desastre sanitario anunciado. O atenuar su responsabilidad por el exceso de víctimas que su ceguera empieza a costarle a su nación.