¿Hasta qué punto los PLE son la solución perfecta para dar un giro al sistema de educación?
Por: Hernán Augusto Tena Cortés
Si se mira hacia atrás es posible inferir que el sistema educativo y el aprendizaje dependían de la fiabilidad del saber y de quien lo transmitía. Cada momento histórico tuvo portadores como el jefe de tribu, el filósofo, el clérigo, el maestro, el profesor o el tutor. Con el pasar del tiempo se centralizó en la escuela (en todos los niveles) y en los libros donde se plasmaba todo el conocimiento por tema y nivel de complejidad. Así que quienes necesitaban consultar o ampliar su intelecto acudían a una asesoría personalizada o consultaban en la biblioteca siendo estos dos los entornos de aprendizaje más asequibles para todos.
Hoy en día los Entornos Personales para aprender (PLE) o en inglés “Personal Learning Environment” han tomado un giro interesante con la llegada de internet y el fácil acceso que hoy tenemos a la información. Nos encontramos en la era de la inmediatez recibiendo en nuestras aulas estudiantes nativos de la tecnología en plena globalización. Donde podemos acceder de forma rápida y sencilla a todo el conocimiento que constituía en otros momentos el grueso de la educación escolar, con el plus que podemos comentar, recrear y debatir con otras personas sobre el tema consultado, teniendo paso a todo al alcance de un clic.
Por lo anterior, es evidente que estamos educando seres humanos del siglo XXI con maestros del siglo XX y metodologías del siglo XIX, demostrando que es hora de hacer unas adaptaciones curriculares y enfocarnos en la educación personalizada. Hoy día no podemos negar que vivimos en una crisis educativa. Si invertimos un poco de nuestro tiempo en la lectura de la constitución política y en la ley general de educación, entenderemos que Colombia es un país con unas políticas muy bien establecidas. Sin embargo gran parte de lo que está escrito no se cumple y muchos actores de la educación no se interesan por actualizarse frente a los requisitos y herramientas para esta nueva generación de nativos digitales. El fin de los PLE es caracterizar a cada estudiante y hacerle su propio ambiente según su estilo de aprendizaje, con seguridad nos preguntaremos ¿cuántos líderes del proceso catedrático estarán dispuestos y preparados para esto?
Al pensar en un cambio para el sistema educativo es imposible dejar a un lado las nuevas tecnologías de la información; de hecho, algunos autores como Collins y Halverson (2010), afirman que existen aspectos incompatibles entre la sociedad que aprende con tecnologías y la sociedad que aprende exclusivamente con los medios tradicionales de la escuela. Teniendo en cuenta la anterior posición, se dice que los PLE son una idea útil sobre cómo aprendemos en el siglo XXI, de hecho, nacieron alrededor del año 2001. Este proceso de enseñanza se centra en el alumno como evolución de los entornos virtuales de enseñanza y aprendizaje.
Por consiguiente, los ambientes de aprendizaje personal son posibles gracias a la inmersión tecnológica y la implementación de las TIC. Existen muchas relaciones entre la didáctica en los diferentes niveles de educación y los PLE, pues la primera en este caso son los medios que se utilizan para llegar a la meta que en el currículo nos planteamos, y los segundos, son un conjunto de didácticas digitales que implementamos con el fin de transmitir conocimiento y personalizar la educación. (Castañeda & Adell, 2013)
¿Qué son entonces los PLE?
Los entornos personales de aprendizaje los definen como “(...) el conjunto de herramientas, fuentes de información, conexiones y actividades que cada persona utiliza de forma asidua para aprender” (Adell y Castañeda, 2010, pág. 23). Dicho de otra manera, se deben configurar procesos, experiencias, actividades, objetivos y estrategias que los alumnos deben vivenciar para poner en marcha su proceso de aprendizaje en condiciones de virtualidad. Teniendo en cuenta que para muchos esta configuración resulta ser algo nueva porque surge de forma paralela con las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, la adaptación a este modelo de aprendizaje dependerá de qué tan frecuente es la exposición, asequibilidad y acceso que tengan a estos medios los diferentes actores educativos.
Es común encontrar resistencia a este modelo de educación por tomarlo como algo poco formal o carente de socialización y trabajo colectivo como es constante en la presencialidad. Sin embargo, las herramientas tecnológicas actuales (plataformas, aplicaciones, redes sociales, edutekas, etc.) facilitan el aprendizaje individual y colectivo, este último rompiendo la distancia y los tiempos, permitiendo el trabajo grupal sin importar el lugar donde nos encontremos. Lo anterior, gracias a que para este tipo de comunicación los PLE integran en tres aspectos:
a. Leer: Por medio de las herramientas multimedia
b. Escribir y reflexionar: por medio de herramientas que permitan producir y publicar.
c. Compartir y reflexionar en comunidad: por medio de una red personal de aprendizaje.
El primer componente del PLE es la lectura multimedia haciendo uso de las herramientas, actividades, sitios y otros mecanismos que contienen información pertinente para el tema de aprendizaje en formato virtual. En estos entornos, se debe llevar esta información más allá de los newsletters, blogs, video y listas RSS integrándola en procesos; es decir, diseñando un entorno donde el estudiante acceda a la información que necesita, enlazado a motores de búsqueda y actividades que fortalezcan y afiancen lo enseñado, estimulando actitud y aptitudes de independencia en la búsqueda de información pertinente y de calidad que enriquezca su proceso de aprendizaje.
El segundo componente escribir y reflexionar (hacer) requiere del diseño de actividades (guías, diarios de campo, mapas conceptuales, videos, etc.) donde el estudiante haciendo uso de la información proporcionada en el entorno de aprendizaje pueda construir (reflexionar) de forma escrita y dando sentido al conocimiento que se adquirió. Se fortalecen procesos mentales de reflexión, síntesis, caracterización, interiorización y reelaboración de la información desde un punto de vista personal sumado a la motivación dada por el docente o tutor para poner en marcha este proceso. Esta reelaboración de la información requiere sitios donde se puedan publicar estos productos, para ello hacemos uso de Blogs, muros personales en redes sociales, páginas web que permitan formato de audio (podcast) y video.
El tercer componente compartir y reflexionar en comunidad hace referencia a que esa disciplina de aprendizaje y reconstrucción no se limita solamente a la producción documental e individual, sino que incluye personas como fuentes de orientación e información y pares que comparten experiencias para enriquecer el conocimiento. Dicho de otro modo, los PLE a pesar de ser un ambiente diseñado para el estudiante y su ritmo de aprendizaje, incluyen un entorno social o red personal (PLN) como parte fundamental de los mismos. Estas interacciones se convierten en el eslabón más importante, pues permiten al aprendiz reflexionar, compartir, discutir, reconstruir y aclarar dudas en comunidad, dinamizando de esta manera el intercambio de conocimiento base para reafirmar o reelaborar las concepciones sobre un tema o conocimiento determinado, todo esto facilitado (claro está) por las herramientas tecnológicas actuales donde se publican experiencias: redes sociales, foros, conferencias, reuniones, actividades en red, entre otras. .
Estos tres aspectos del PLE se integran (transversalizan) en la medida que los mecanismos virtuales utilizados permitan que concurran entre sí. Es evidente que esta propuesta presenta no solo una evolución en el modelo educativo, sino el camino al aprendizaje significativo, pues está planteada para que cada aprendiz goce de su ambiente personal de aprendizaje e interactúe con sus compañeros pasando por el proceso de currículo espiral o de indagación, reflexión y acción. Sé que usted apreciado lector quizá esté pensando que esto es una carga de trabajo adicional o que en su defecto es muy dispendioso. Seguramente tenga razón en cierta medida, pero lo que sí no da lugar a discusión es su efectividad y la gratificación cuando como docentes vemos el resultado.
Pero… ¿qué es eso de currículo espiral?
Jerome Bruner autor de la psicología cognitiva del descubrimiento en su teoría buscó la construcción del conocimiento mediante la inmersión del estudiante en situaciones de aprendizaje problemático para que este aprenda descubriendo. Él hizo mención a un plan de estudios ideal que ofrezca materiales y contenidos de enseñanza a niveles cada vez más amplios y profundos, que al mismo tiempo se adapten a las posibilidades del alumno definidas por su desarrollo evolutivo.
Por lo tanto el currículo debe ser en espiral y no lineal, volviendo constantemente a retomar con niveles superiores de profundidad. De ahí entonces la producción de IRA (indagación, reflexión y acción). En la etapa de indagación, el estudiante consulta información y la interioriza. En la de reflexión, el estudiante considera con atención, comprende y concluye. Mientras en que en la de acción, el estudiante hace, como se diría coloquialmente, se ensucia del conocimiento. Finalmente, regresa a indagar con mayor profundidad. Se podría ejemplificar en matemáticas. El estudiante pasa por las tres etapas con el objetivo de aprender a sumar, luego de hacerlo, repite el proceso pero esta vez para multiplicar.
¿Cómo hacer un PLE?
Hay algo que la tecnología nunca va a reemplazar y es ese ingrediente único que cada profesor agrega a sus clases, esa receta de la abuela que cada quién lleva al aula. En ese sentido, no existe un cómo exacto, pero sí se pueden sugerir algunos pasos que de cumplirse, llevarán a la creación de un PLE ante todo pronóstico. Para continuar, es preciso hacer una recomendación alrededor del destino del ambiente, pues dado el contexto y la cantidad de alumnos por grupo, termina siendo casi imposible realizar un producto por estudiante, de modo que se insta a realizar uno por tema, es decir, a adoptar esta modalidad en su planeación. Pues el encanto es que se crea una vez y queda sirviendo “ad infinitum”, siendo por supuesto sensible de actualización.
Los PLE por lo general se dividen en seis secciones. Es menester del autor decidir cuál será la fuente de socialización, asimismo de delimitar la información de calidad que incluirá en el marco teórico. Quién les escribe con frecuencia realiza los ambientes a través de blogs o en portales gratuitos como Wix. Sin embargo, la forma más fácil para organizar todo puede ser a través de árboles de carpetas en sistemas de alojamiento como Google Drive o DropBox.
Pero ¿cómo así que seis secciones? Si, así es, pero no se preocupe que es muy sencillo. Siga leyendo y encontará la solución a su planeación, podrá notar que no es más trabajo y mucho menos dispendioso, luego sí una manera estructurada y atractiva de presentar la información. La clave es simplemente documentar todo lo que hacemos. Las secciones corresponden a inicio, enfoque temático, redes sociales, recursos de apoyo, actividades, fuentes y autor.
1. Inicio: es muy importante incluir información de interés, algo que capte la atención del alumno, es como la entrada en su plato favorito. Mencione el nombre del tema y un ejemplo real de su aplicabilidad. Se puede hacer a través de frases, mensajes cortos, TED Talks, videos de Youtube o use su creatividad.
2. Enfoque Temático: se tiene en cuenta el marco teórico, lo que en Colombia se conoce de manera metafórica como el ladrillo. Incluya aquí los objetivos de aprendizaje y las competencias a desarrollar.
3. Redes Sociales: es el enlace a las comunidades virtuales con el fin de proveer ambientes de socialización y de construcción colectiva para instar al debate. Incluya las suyas siempre y cuando sean de uso exclusivo para la academia, si es usted de esas personas que mezcla su vida privada con estos espacios, evite dar acceso a las mismas, pues en ocasiones sus propias publicaciones pueden restar autoridad académica. Se recomiendan grupos de Whatsapp, de Instagram, Blogs, foros de discusión, creación de Wikis propias, entre otros.
4. Recursos de Apoyo: se tendrá en cuenta material bibliográfico adicional, pues cuando se crea la curiosidad, se quiere ir más allá. Incluya videos, pues según estudios en pocos años la información en la red será sólo presentada en video.
5. Actividades: se describe la guía de práctica o en su defecto se dan las instrucciones del producto esperado. Hágalo a través de una rúbrica de evaluación, sea claro con el estudiante, detalle el producto esperado. Recuerde que en materia virtual todo debe presentarse de manera tan clara que los aprendices pueden desarrollar la actividad sin necesidad de pedir aclaraciones.
6. Fuentes y actor: se plasma toda la información bibliográfica y de autoría, pues en la sociedad del conocimiento es cada vez más común que nos apoyemos en terceros y en pro de la propiedad intelectual, respetar los derechos de autor resulta categórico.
Se concluye entonces en que hay una necesidad implacable de seguir rompiendo paradigmas alrededor del aprendizaje y la enseñanza virtual. Si alguien aún considera que esta es poco efectiva o cae en el error de desvirtuarla, seguramente no ha comprendido el cambio de roles con relación a la también significativa práctica presencial. Sin embargo, es importante mencionar que la efectividad de los modelos asincrónicos depende de qué tan atractivo es el material diseñado y por supuesto, de la edad del estudiante.
Si usted considera que es un profesor de mente abierta, ponga en práctica este modelo y escriba para despejar dudas o ampliar el debate. Dando clic en el siguiente enlace podrá encontrar un PLE que se diseño y se tituló “Los PLE, la solución perfecta para dar un giro al sistema de educación”. (https://heteco2010.wixsite.com/ladidacticadigital), puede realizar el suyo con base en lo que visualizará si visita el sitio.
Finalmente, si se tiene en cuenta que los nativos digitales son en su mayoría visuales, además de los estilos de aprendizaje y las inteligencias múltiples, se puede responder que los PLE son la solución perfecta para dar un giro a la educación hasta el punto que integran los contenidos de siempre con herramientas vanguardistas dirigidas a los estudiantes del siglo XXI. Se deja entonces el gran interrogante, ¿hasta qué punto los educadores están dispuestos a transformar su práctica y crear mayor impacto?
Referencias
https://heteco2010.wixsite.com/ladidacticadigital
Castañeda, L., & Adell, J. (2013). Entornos personales de aprendizaje: claves para el ecosistema educativo en red.
Dina García Pérez, colaboró
de Zuburía, Julian;Pienso luego existo. (20 de Junio de 2012). Youtube. Obtenido de Retos a la educación latinoamericana en el siglo XX1 Dr Julian de zubiría. Colombia: https://www.youtube.com/watch?v=PD5yAxFAcgc