De Pacificador a Enemigo acérrimo de la Paz. Por una fuerza que transforme Colombia.

Por: Mauricio Vargas González.

De pacificador que llevó a la guerrilla hacia el repliegue y que desmovilizó a los paramilitares –una desmovilización parcial, turbia, cuestionada- al acérrimo enemigo de la paz, Uribe será recordado, no ya como el presidente de la "seguridad y la concordia" sino como el ex-presidente mezquino que le puso todos los palos en la rueda a la paz de un país que ha sufrido por más de cinco lustros los desgarradores efectos de un conflicto armado que desplazó a seis millones de colombianos y en el cual murieron 218.094 compatriotas, 82 por ciento, civiles. (1) Mientras Santos, con Nobel de Paz en mano, ahora se esfuerza por sacar adelante la reglamentación de los acuerdos con el respaldo del Partido Liberal, y demás partidos de la Unidad Nacional, además del respaldo de la ciudadanía y de partidos políticos alternativos y organizaciones sociales.(2)