Pipe

A propósito del 30 de agosto (Día Internacional de los Desaparecidos)
Por: Paola Cervera Quintero
No está tan sencillo esto de vivir, más si naciste en un país de esos que por no ofenderlos, los llaman en vías de desarrollo. El pobre trabajaba fuertemente cuando podía, y no tenía ni siquiera la posibilidad de acceder a un trabajo estable, sino de aquello que se presentara, sometido al azar siempre. No era tonto, no era vago, no era deshonesto, pero parece ser que nada de esto era importante. Para agravar la situación, todos culpaban a cada individuo por su fortuna o su pobreza, lo que lo hacía sentir un poco más desdichado cada vez.
Él no quería tener hijos, ¿para qué?, realmente no sentía arraigo en una tierra que no le permitía echar raíces, pero que tampoco le permitía irse.