Agresión de los medios de comunicación a colegios públicos.

Por: Diana Marcela Cañón L(1)

Es innegable la presión hecha por parte de las bandas de microtráfico hoy en nuestros colegios y universidades para incentivar el consumo de sustancias psicoactivas en los niños y jóvenes. Pero ¿de quién es la responsabilidad? ¿Acaso el educar y enseñar es solo deber de la escuela? ¿Qué responsabilidad tienen y asume los medios de comunicación?

Hace unos días publiqué en mi mi red social Facebook que es muy triste e indignante que canales privados colombianos promuevan en los niños que es más honroso consumir drogas, tener una navaja y ser un vándalo que estudiar, leer, jugar sin malicia, porque esto ahora significa ser un “loser”, un “ñoño”.

Desde hace un par semanas no pasa un día sin que los medios de "información" (diarios, noticieros, emisoras) hagan referencia a lo sucedido en el colegio Marco Fidel Suarez, y dan a entender que es una situación aparentemente "normal" en los demás colegios públicos de la ciudad y del país, y sus informes pretenden demostrar el aumento del consumo en las niñas, niños y jóvenes actualmente. ¿Pero acaso asumen parte de culpabilidad en la causa de tal fenómeno? No sé ustedes, pero yo no los he oído. Es fácil y lucrativo estigmatizar a los estudiantes, culpar a los maestros y hasta mencionar la responsabilidad de los padres, pero ¿acaso algún medio de comunicación ha dicho que una de las causas también son sus emisiones?

La televisión colombiana ha puesto en su parrilla novelas alusivas a los narcotraficantes, paramilitares, a las pandillas, al consumo de drogas; un ejemplo que me retumba hoy es el de Diana Salinas y su periodismo de inmersión, 200 horas consumiendo marihuana. Ejemplos hay por montones: Pablo Escobar, los hermanos Castaño, las muñecas de la mafia, pandillas guerra y paz, y puedo seguir mencionando.... Y ni qué hablar de los noticieros, pues es noticia el consumo de drogas psicoactivas, los atracos hechos por jóvenes, el crimen, el porno, las modelos y sus estereotipos de belleza, el amarillismo. Critican duramente lo que sucede en los colegios del Distrito, pero no asumen que al llegar un chico a casa y prender su tv es bombardeado con estos programas que hacen mella en los jóvenes y que nos los han vendido como la cultura nacional. Otro ejemplo más es la novela basada en un cantante inmerso en drogas y un asesinato. ¡Qué programación tan constructiva! Y ¿por qué omiten que la misma presión de las bandas del microtráfico es ejercida también en colegios y universidades privadas?

El diario El tiempo presenta un informe de la Universidad La Sabana y un estudio de la fundación Stop Bullying Colombia, sobre lo que sucede en los colegios de Bogotá. Según este último, un estudiante afirma que 15 de 40 estudiantes de su salón son consumidores; adicionalmente afirman que los docentes conocen la problemática pero hacen caso omiso a ella y que uno de los impedimentos más fuertes para tratar e investigar el tema son los rectores. Pero peor aún, el estudio de la Universidad de la Sabana hace suponer lo antisocial de los estudiantes del Distrito y menciona que 31% de los estudiantes consultados han participado en hurtos, 16% participaron en agresiones físicas a otras personas, 9% han sido arrestados, 7% pertenecen a pandillas y 5% venden drogas en sus colegios.

Y reitero mi pregunta: ¿acaso existe algún estudio, informe o autocrítica sobre la corresponsabilidad en esta problemática por parte de los medios de comunicación? ¿Es solo un asunto mediático? Hoy toma vigencia el artículo del profesor Miguel Ángel Pardo Romero, Algo más sobre la propuesta de emergencia educativa:

    "Declarar una Emergencia Educativa debe ser una decisión política del Gobierno de la Capital, apoyada por el Concejo Distrital, que le permitiría dotar a la Ciudad de instrumentos eficaces para proteger y apoyar a la escuela, a los niños y niñas, a los jóvenes, a las maestras y maestros y demás integrantes de la comunidad educativa, frente a las grandes dificultades sociales que soporta como por ejemplo, la agresión de las bandas delincuenciales, el microtráfico y la presión negativa de grupos al margen de la ley, entre otros. Es necesario proceder con decisiones de fondo administrativas, pedagógicas y presupuestales, que garanticen las condiciones indispensables, para seguir elevando el nivel académico, la promoción y la convivencia escolares; como también, para materializar como derechos la educación y el disfrute de la cultura, la recreación y el deporte, sustrayendo a los menores de edad de la órbita de la delincuencia y de la reproducción de los comportamientos violentos".

Para los medios de desinformación no son noticia los foros educativos locales, las innovaciones, iniciativas e investigaciones pedagógicas, nada importa la Semana de la Educación Alternativa, SEA, ni mucho menos el encuentro del Centro Estudios e Investigaciones Docentes, CEID de la Asociación Distrital de Educadores ADE- sobre innovación en la escuela rural. Los asuntos de importancia en materia de educación se las reconocen solo a fundaciones privadas como Compartir.

Es por ello que hacemos un llamado a las maestras, maestros, directivos docentes y a la comunidad educativa en general a fortalecer los consejos académicos y directivos, de estudiantes, de profesores y el trabajo mano a mano con los padres de familia.

El Consejo Nacional Superior Estudiantil de Colombia CONSEC- cree y defiende la educación pública estatal, científica y democrática.
No más estigmatización a los colegios públicos... No más estigmatización a los docentes y mucho menos estigmatización a los estudiantes.

1) Estudiante de Licenciatura en Ciencias Sociales de la UPN, Presidente del Consejo Nacional Superior Estudiantil de Colombia -CONSEC- . Radio Revista Encuentros Pedagógicos, domingo 23 de agosto de 2015.

Compartir